Menu

Qué hay que tener en cuenta a la hora de comprar el chupete?

La necesidad de succionar del bebé es muy fuerte durante los primeros meses de vida. Esto obedece a la etapa de desarrollo llamada etapa oral donde la mayor gratificación y modo de descubrir y reconocer el mundo pasa por la boca.
Esa necesidad tiende a ser satisfecha por el propio bebé llevándose a la boca todo lo que esté a su alcance, el pecho materno, sus propias manos, etc. Esto le permite alimentarse y además le da placer, lo calma y tranquiliza.
Con el objeto de calmarlo y tranquilizarlo generalmente los padres introducen el chupete cotidiano de los bebés.
También suele ser introducido para mejorar el sueño nocturno. En los últimos años el uso del chupete nocturno ha sido relacionado con la reducción del riesgo de muerte súbita del lactante. Otras medidas demostradas de utilidad son la mantención de la lactancia materna exclusiva, la posición de dormir boca arriba y los ambientes libres de humo de tabaco.
No es recomendable introducir el chupete en los primeros días de vida, especialmente si el bebé está siendo amamantado a fin de priorizar el inicio de la lactancia materna y no confundir con tetinas de chupete o biberón.. También debe evitarse que el bebé los primeros días calme su interés por comer y la recuperación del peso que habitualmente desciende luego del parto.
Qué chupete elegir?
Los chupetes vienen de diferentes formas y medidas, Hay una gran variedad como anatómicos y no anatómicos, de silicona, de látex. Por una cuestión de comodidad el bebé generalmente elije el que más se adapte a su boca.
La mayoría de los chupetes vienen identificados por el tamaño que corresponde a cada edad.
Aquellos chupetes que tienen orificios de ventilación previenen que la saliva se junte detrás del mismo y le genere irritaciones o paspaduras.
Es importante recordar que se desaconseja el uso de collares, hilos o cintas para colgar su chupete alrededor del cuello ya que puede generar riesgo de asfixia.
Cuando reemplazar el chupete del bebé?
Generalmente se cambia cuando requiera adaptarse al tamaño de la boca del bebé o cuando sufra signos de deterioro. Los signos de deterioro son rajaduras, ajaduras y zonas desgastadas que puedan romperse y ser aspirados por la succión del bebé con el consiguiente riesgo de atoramiento.
Los bebés tienen sumo apego con su chupete y suelen resistirse al cambio aunque esté muy deteriorado.
Cómo limpiar el chupete?
Los primeros meses lo ideal es esterilizarlos una vez por día y cuando se compra un chupete nuevo. Puede hervirse unos minutos al igual que los biberones. Siempre dejarlos enfriar luego de hervirlos y antes de dárselos.
Si el chupete se cae al piso dentro de la casa puede lavarse con agua caliente. Si se cae en la calle o cualquier otro lugar conviene tener uno limpio de respuesta o solicitar para lavarlo con agua caliente.
Qué precauciones tomar?
Especialmente en los recién nacidos que la succión del chupete no interfiera con la puesta al pecho y la alimentación.
Además de la higiene adecuada no untarlo en azúcar ni cualquier otra sustancia azucarada que pueda generar caries dentales. En el caso de la miel ésta puede vehiculizar esporas productoras de botulismo.
El uso prolongado del chupete más allá de los 18 a 24 mese puede generar modificaciones en la arcada dental, el paladar y la alineación de los dientes.